A la mañana siguiente, recibí una llamada. Era Elena. Resulta que a Mirian la acababan de atropellar y estaba algo grave. Me asusté, me sentía culpable, por no estar allí. Se lo conté a Sergio, él me dijo que fuese a Madrid si así me sentiría mejor. Él no podía venir porque tenía que entrenar, pero yo no estaría mucho tiempo lejos. Hice la maleta corriendo mientras Sergio conseguía el billete más temprano.
Sergio: No te preocupes por mí. Estaré bien.
María: Pero te voy a echar mucho de menos.
Sergio: Y yo a ti cielo.
María: Te prometo que será poco tiempo.
Sergio: Estate allí lo que necesites, tu amiga te necesita.
María: Y yo te necesito a ti.
Me besó suave pero apasionadamente. Nos fuimos a la estación.
Megafonía: El tren con destino Madrid saldrá en 10 minutos. Pasajeros al tren.
María: Cuando llegue te llamo. Te amo.
Sergio: Está bien. Te adoro princesa.
Nos abrazamos. Entre al tren. Esperó a que saliese el tren y agitó la mano despidiéndome. Salí a las 8:45h y en 2 horas y media estaba en Madrid. Llamé a Sergio para decirle que había llegado bien. Después a Elena.
María: Elena, ¿en qué hospital estáis?
Elena: ¿Ya has llegado? En el Infanta Leonor.
María: Vale, ya salgo para allí. Voy a coger un bus. Lo que me cueste ir.
Elena: Bien, no te preocupes. A Mirian la operan esta tarde.
María: ¿Cómo que la operan? Bueno luego hablamos, cuando vaya llegando te mando un sms, que subo ya al autobús. Un beso.
Elena: Adiós.
Llegué en una hora, ya que hubo unas retenciones. Me contestó Elena diciéndome en qué planta estaban. Subí a la 4ª planta.
María: (Casi susurrando) Hola chicas.
Elena: (Gritando) María, cielo. ¿Qué tal el pelos rubio?
María: ¿Te refieres a Sergio?
Elena: Así es.
María: Pues bien, en Sevilla que se ha quedado. Le quiero mucho.
Elena: Enamorada de la vida.
María: ¿Y qué tal Mirian?
Elena: Se ha tomado la pastilla para los dolores y se ha quedado frita hace media hora.
María: ¿Pero qué le pasó?
Elena me lo contó, y pasamos tiempo charlando sobre el tema y más cosas.
Elena: ¿Sabes que el día de antes del acidente conocimos a unos chicos muy majos?
María: ¿Sí?
Elena: Sí, van a venir esta tarde a ver a Mirian antes de que la operen. Uno se quedó prendado al verla.
María: ¿Pero ibais las dos solas?
Elena: No, quedamos con Irene y Carla que llamaron a Mirian para dar una vuelta.
María: Ah vale.
Elena: ¿Cuánto tiempo te vas a quedar aquí en Madrid?
María: Lo que sea necesario.
Elena: Vale.
Se pasó la mañana muy rápido, aunque Mirian aún no había despertado. Elena me preguntó si bajaba a comer algo. La cafetería estaba en la planta baja.
María: No, yo me quedo aquí por si Mirian se despierta. Si eso cuando subas tú ya me bajaré a por algo.
Elena: Si quieres te subo un sandwich.
María: No te preocupes, luego bajo yo, enserio.
Elena bajó. Eran las 15:00h. Llamaron a la puerta de la habitación y abrí. Eran 5 chicos, a cual más guapo. Me dijeron que si aquí estaba Mirian y les dije que era amiga suya. Se presentaron.
David: ¿Tú eres la sevillana?
María: Jajaja, bueno... yo soy madrileña, pero llevo medio mes viviendo en Sevilla.
David era un morenzao, alto y muy simpático. Siempre sonreía.
David: Yo soy granadino.
Blas: ¿Qué tal está Mirian?
Blas es el que se había quedado enamorado de Mirian al verla. Era algo más bajito pero con unos ojos azules increíbles.
María: En todo el tiempo que llevo aquí, no se ha despertado. A las 17:00h. la operan.
Estuve hablando con Dani, Carlos y Álvaro, que eran amigos de David y Blas, hasta que subió Elena.
Elena: Chicos, habéis venido. Muchas gracias.
María: Llevan como media horita aquí.
Elena: ¿Y Mirian se ha despertado?
María: No. Bueno, me bajo a por algo. Subo en nada.
Aproveché para llamar a Sergio. Le conté que Mirian seguía dormida y que en menos de hora y media la operaban. Le deseó suerte. Me compré un bocadillo de jamón en una cámara expendedora. Una enfermera me preguntó si era familia de Mirian, y le dije que era amiga.
Enfermera: La operación es en una hora. Debe despertarse media hora antes. Subiremos a por ella para llevarla al quirófano.
María: Está bien. Pero, si ella no se despierta, ¿cómo la despierto?
Enfermera: No se preocupe, señorita. Subiré en 10 minutos para ver que tal va. Y si eso ya llamaré al doctor.
María: Vale. Muchas gracias.
Subí a la habitación. Mirian seguía dormida. Les conté lo que me acababa de decir la enfermera.
Elena: ¿Qué se piensa, que nosotras no sabemos cómo despertarla?
Dani: La enfermera prefiere que no le pase nada, ellos saben como despertar a un enfermo.
Pronto me dí cuenta que Elena y Dani no se llevaban muy bien. Según me contó Elena, Álvaro era genial, y para mí que le gustaba. Subió la enfermera en poco tiempo, acompañada del médico. Nos hicieron salir de la sala. En poco tiempo salieron y nos dejaron entrar. Mirian ya estaba despierta y se alegró al verme. Le pregunté si estaba mejor, y me dijo que sí. En pocos minutos llego una chica, y se llevó a Mirian al quirófano. Nos dijo que tardarían bastante tiempo. Tenían que operarla de las piernas, los brazos y unos coágulos de sangre que se le habían formado con el golpe. El derrame no era muy extenso, y por suerte no en zonas del cerebro cercanas a lo vital.